Xólotl (en náhuatl: xolotl, ‘el animal’‘xolotl, animal’)? en la mitología mexica y tolteca es el dios del ocaso, de los espíritus, de los gemelos y del Venus vespertino, el cual ayudaba a los muertos en su viaje al Mictlán, señor de la estrella de la tarde (Venus) y del inframundo.
Xólotl era también el dios de fuego y de la mala suerte. Era gemelo de Quetzalcóatl, y la personificación maligna de Venus. Protege al Sol cuando viaja a través del inframundo durante la noche. También llevó adelante al género humano y le entregó el fuego de la sabiduría. En el arte, Xólotl fue representado como un esqueleto, un hombre con cabeza de perro – «xólotl» también puede significar un animal monstruoso con pies invertidos en náhuatl, la lengua azteca. Era también el patrón del juego Ulama. Es identificado con Xócotl como el dios azteca del fuego.
Tipo: Críptido
Subtipo: Criaturas mitológicas, Deidades mexicas, Dioses de la navegación, Dioses celestes, Dioses del inframundo, Mitología mexica, Mitología tolteca
País: México
Región: Centroamérica
Hábitat: Montañas
El nombre del ajolote (en náhuatl: axólotl < a-tl + xólo-tl, ‘Monstruo del agua’)?, un tipo de salamandra neoténica natural de México, no proviene directamente del dios, aunque la mitología los relaciona directamente: cuando los dioses debieron ser sacrificados para poner en movimiento al Quinto Sol, Xólotl se escondió para no ser muerto. Primero se convirtió en una planta de maíz de dos cañas o ajolote (xolotl); al ser descubierto echó a correr otra vez y se escondió en un magueyal, donde tomó la forma de una penca doble o mejolote (mexólotl, de metl, maguey y xolotl). Una vez más lo halló el verdugo y escapó de nuevo introduciéndose al agua, donde se transformó en un anfibio llamado axolotl. Ésta es su última metamorfosis. Finalmente, el verdugo lo atrapó y le dio muerte. Xólotl es un dios que le tiene odio a la muerte, que no la acepta y quiere escapar de ella mediante sus poderes de transformación.
El xoloitzcuintle es el nombre del perro mexicano sin pelo (también conocido como Perro Pelón Mexicano), especie canina propia de México y Centroamérica. Es una de muchas razas de perros originarios de América. El nombre xoloitzcuintle (en náhuatl: xólo-tl + itzcuin-tli, ‘Perro de Xólotl, Perro monstruoso’)? hace la referencia a Xólotl porque, históricamente, una de las misiones de este perro era acompañar a los muertos en su viaje en la eternidad, del mismo modo en que el dios era acompañante del viaje del Sol por el inframundo. A pesar de este lugar prominente en la mitología, la carne del Xoloitzcuintle era parte de la dieta de algunos pueblos de Mesoamérica durante celebraciones religiosas especiales.