UN ALMA MALVADA.

Salimos de camping mis dos hermanos y yo, no muy lejos de casa, pero si lo suficiente para disfrutar de la soledad y el paisaje.

Mi hermano mayor estaba recién salido del ejército y traía sus trucos para sobrevivir en la naturaleza, sistemas de caza con trampas artesanales y las famosas letrinas que constaban de cavar un profundo hoyo en la tierra para hacer nuestras necesidades fisiológicas y así protejer el ambiente, estábamos en esta ya habíamos bajado más de un metro cuando dimos, con sierto objetos extraños, parecían unas argollas o anillos era 3 de un material antiguo, junto con ellos unos polvos entre una pequeña bolsita pero no plástica parecía de tela o algo así por que se conservaba perfectamente, guardamos esos artículos en mi mochila y seguimos con nuestra labor de camping, nos dormimos ya tarde, pero antes de que pudiéramos dormir sentimos el silbido fuera de nuestra carpa salimos a ver si era alguien perdido o otro campista de cerca que necesitaba ayuda, los tres salimos al tiempo, pero no había nadie, así pasó toda la noche, no pudimos pegar el ojo , a la noche siguiente fue peor se sentía como si nos fueran a arrancar la carpa de camping y se sentía un quejido como un animal o persona herida, al siguiente día nos madrugamos para casa de nuevo llevábamos dos noches sin dormir, no habriamos caminado un kilómetro, cuando perdimos el camino, los tres estábamos desorientados, el lugar donde estábamos no lo conocíamos, se podrías decir que nos transportaron a otro lugar, dimos vueltas por el mismo lugar todo el día, podíamos caminar en línea recta para cualquier lugar y siempre volvíamos al mismo sitio, cuando nos envolvió de nuevo la noche sacamos nuestras bolsas de dormir, no queríamos armar carpas, para muestro asombro, estábamos en el lugar de origen donde habiamos acampado al llegar.

Hicimos una fogata y nos reunimos al rededor toda la noche, los tres podíamos ver una figura que nos vigilaba, toda la noche estuvo al acecho parecía ser un indígena por las vestimentas que le veíamos en la oscuridad, para más terror, tambien se veía una especie de perro o algo así pero menos nítido se podría decir que sólo eran sombras, no supimos a que horas nos logramos dormir, cuando despertamos todas nuestras pertenencias habían desaparecido, solo nos quedaba lo que teníamos puesto y los sacos de dormir que los teníamos a medio poner , recogimos todo de prisa y tomamos rumbo a casa, nos paso exactamente lo mismo del día anterior, mi hermano menor, soltó el llanto diciendo que íbamos a morir, mi hermano mayor lo animo, tanto a él como a mi, por que también yo estaba muy asustado, cuando nos vimos perdidos, nos sentamos a esperar, no tenía sentido cansarnos de esa manera de un momento a otro estábamos en el lugar de origen, mi hermano mayor fue a la letrina a hacer sus necesidades, cuando dentro de esta pudo ver todas nuestras cosas, cabe añadir que la letrina aún no se habia usado, sacamos todo y revisamos con paciencia todo estaba allí, incluido los objetos que encontramos al hacer la letrina, los cogí y sin decir nada los tire al hueco donde nos habíamos encontrado, les dije a mis hermanos que taparamos de nuevo, cuando terminamos el ambiente cambió todo parecido nuevo, cogimos camino a casa y pronto llegamos a la carretera donde pasaba el autobús.

Leer también:  No lo leas

Cuando llegamos a casa contamos la historia a mis padres, incluido el abuelo que andaba de paseo, cuando terminamos de contar, el abuelo nos dio una explicación que aunque lógica podía ser aterradora.

Hace muchos años esa región fue habitada por indígenas, como era creencia entre ellos, el alma de un indio trasciende después de la muerte si eres bueno ti alma va a un lugar maravilloso, si eres malo, tu alma queda rondando en este mundo, no puede descansar en paz, hasta que te arrepientas, pero hay almas tan malvadas que no se arrepienten por el contrario, se dedican a hacer el mal, cuando esto sucede, un hermano, primo, padre o tío, debe custodiar esa alma, lo que hace es que cuando muere, queman el cuerpo, y lo echan el bolsas de tripa de caballo, las entierran con las pertenencias más queridas del muerto, después de que también muere el familiar que está encargado de esa alma, su alma vigila que está nk escape donde está atada y así no pueda hacer mal, lo. que ustedes hicieron fue encontrar el origen de esa alma malvada, al quererla traer, el alma buena lo impidió, eso es lo que vieron el indio custodio y el alma malvada.

Días después busque en Internet esas creencias de los indígenas y efectivamente mi abuelo estaba en lo cierto hay algunos que han logrado liberar esa almas malvadas y les han ocurrido muchas desgracias.

Deja un comentario