Desconectados de Amor. (+18)

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ADVERTENCIA: Lo Que Se Publica En Esta Pagina, Tiene El Fin De Entretenimiento.

La siguiente historia no se recomienda leer para personas moralistas o de mentes debiles.

Contiene descripciones graficas y sexuales, No nos hacemos responsables por daños mentales.
Terror Psicologico1 se deslinda totalmente de la responsabilidad y el impacto que pueda causar esta historia. 

La pornografía… es lo único que me satisface, es solo lo que me hace sentir más y más satisfecho, puedo ver una gran variedad de mujeres siendo penetradas por hombres en su mayoría muy bien dotados, el solo oír sus gloriosos gemidos de
esas perras me hace excitar más que ninguna otra cosa… más que esa puta de mi esposa.

-Harold, ya está la comida, ¿no piensas bajar y dejar por solo un rato de ver tus cosas?
– Dijo ella con un tono firme.

– ¡Yo bajare cuando sea conveniente, querida!

Aló que ella contestó con voz quebradiza y rudeza.

– ¡ya estoy harta, Harold, yo te he dado cualquier libertad de ver pornografía porque
me decías que mejoraría nuestra relación…

Tire el celular a la cama y más que furioso y entrando en un ciclo de desesperación, abrí
la puerta de la habitación y bajé los escalones uno por uno tratando de contener
la gran furia que me trataba de contener.

-A caso, cariñito, ¿tú crees que me das permiso de ver porno?, ¿te crees mi dueña?, pendeja…

A lo que con una voz más quebradiza y casi balbuceando dijo la esposa…

-Pe-pero, somos un matrimonio, debemos de est- est- estar juntos en cualquier decisi…
-la esposa fue abruptamente interrumpida por Harold.

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– ¡cállate!, ¡solo cierra el puto picó por primera vez en tu vida! -Dijo Harold con una voz
despiada y furiosa.

-tú eres una perra descarada, ¿acaso no recuerdas el 19 de febrero?, hace apenas 3 meses?

La esposa solamente se quedó mirando a Harold de manera desconcertada y con mucha extrañeza,
-a lo que la esposa tomó palabra.

-estas alucinando Harold no recuerdo nada en especial en e esa fecha…-ahora Harold
furioso empezaba a gritar-.

-¡ERES UNA HIJA DE PUTA!. Harold terminando de decir esa última oración le soltó un puñetazo
en la cara.

– ¡me engañaste!

La esposa ya hacía en el suelo sangrando de la boca mientras Harold se mantenía erguido
con una postura dominante.

Ese 19 de febrero, la esposa desesperada y con deseo de alguien que a un minuto de tener sexo no eyaculara, como es el caso de Harold que, por ver tanta pornografía durante años, tenía el mal que ningún hombre quisiera padecer, eyaculación
precoz…

La esposa contacto a un prostituto que tenía buena fama, no fue barato, pero la esposa tuvo la experiencia que en años o tal vez toda su vida habría experimentado…

Después de esa tarde, la esposa no actuaba nada bien, ya que ahora solo parecía su esclava, y sólo obedecía a su esposo en lo que fuera, sea sexo o aceptar que su marido siguiera viendo porno, solo actuaba bajo sus órdenes. Su esposo ni si
quiera le pidió disculpas por el puñetazo, solo sirvió para poner una amenaza a su esposa, y si pensaba decirle a alguien lo que pasó, él se encargaría de arruinarle su vida, ya que Harold era un hombre de negocios exitoso y podría contarse a los mejores abogados.

Todo fue bajo el mandato de Harold en la casa. 

Hasta qué dos días después vino lo peor para el… Noticias por la noche.
-El mundo entró en caos por el fin del Internet, las personas se vuelven locas por el alto grado de dependencia que teníamos sobre el Internet, -decía el reportero del noticiero nocturno. A lo que prosiguió.

-no hay nada de salvación, el Internet a muerto para siempre debido al virus más fuerte
descodificado por una falla del sistema central, esto afecta a todos.

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El virus era ni más ni menos que el virus de la muerte total dicho por grandes especialistas de sistemas, llamado «virus barba roja.xp”, no hacía más que hacer que cualquier equipo que anteriormente usaba Internet entrará ese virus y hacia que
dejase de funcionar para siempre sin arreglo posible…

ESA MISMA NOCHE.»LA CONCLUSIÓN».

Harold estaba en su habitación mientras la esposa estaba preparando la cena cuando de pronto,
el virus atacó su ordenador mientras veía nuevamente una sesión de pornografía.

-enciende, ¡pedazo de mierda!, -Harold tiro el ordenador al piso.

-Ya estoy harto, ¡Sara, Sara!, ¡sube acá arriba!

 Llamó a su esposa para discutir que no había Internet y todo llegó a una discusión, Harold sacando una vez más que gracias a ella él se volvió dependiente a la pornografía y que ahora sin ningún tipo de video él es infeliz, por culpa de ella al no complacerlo.

-Harold, ya no aguantare más tus regaños y abusos, ya tuve suficiente de ti, no me importa que hagas, arruíname si quieres, pero yo ya no seré tu víctima, me voy.

Harold, ahora empezaba a bajar la mirada y dejar ver que el ya no era el que dominaba, la esposa «Sara» se dio la vuelta para salir de la habitación cuando de pronto…

– ¡TOMA, PUTA! -Harold tomó el CPU de la computadora y se lo estampó en la espalda.

Sara estaba en el piso gritando del dolor y llorando, mientras Harold reponía su postura de macho dominante, poniendo su pie en su pecho, tomó el CPU y lo levantó diciendo.

-Solo esto es lo que veré… ¡LA MUERTE!

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Cuando Harold casi terminaba la oración, Sara alcanzó a sacar un cuchillo para fruta que había guardado antes de subir con Harold, a lo que dijo después ella.

– ¡TOMA, INFELIZ!

Le encajó el cuchillo en la pierna lo más profundo posible.

Sollozando de dolor Harold tumbo el CPU a un lado y Sara aprovechó esa caída de él para quitarle el cuchillo y tomar vuelo para encajárselo en el corazón (en medio del pecho).

Mientras ella decía. – ¡PUDRETE EN EL INFIERNO!

-Por fin le encajó el cuchillo en el corazón.

Sin respuesta evidente alguna de Harold, el yacía muerto, mientras el piso se cubría de sangre y las manos de Sara que estaban empapadas de sangre.

Ella se tumbó en el suelo mientras decía…

-ESTO SE ACABO POR FIN…

Sara solo cerro los hijos mientras que la sangre de Harold la cubría por debajo del cuerpo. Después de esto solo caminaría ella sola en una búsqueda a la supervivencia del virus barba roja.

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