Existe un tema muy aterrador y misterioso relacionado con el sueño, y es esa sensación que, al dormir, sentimos que existe algo o alguien en el mismo lugar con nosotros. Muchas personas aseguran que esto no es más que un producto de nuestra imaginación, sin embargo, expertos aseguran que existe alguna criatura que nos asecha por las noches, cuando somos más vulnerables. Relatos de personas de todo el mundo aseguran haber sido atacados por entidades durante el sueño, por lo que confirma la teoría.
Los sueños no se presentan sin ningún motivo, todo lo contrario, siempre tienen algún significado sobre algo que nuestro subconsciente intenta decirnos, pero solo podemos escucharlos en los sueños, es por ellos que muchas veces soñamos con extrañas entidades que nos molestan y perturbas y, en ocasiones, según los expertos, pueden tomar hasta el alma de los más débiles. Esta criatura se manifiesta de diferentes maneras y cada una tiene un significado.
Por ejemplo, en la cultura indioamericana de los cherokee, existe la leyenda de una bruja muy temida por los hechiceros de dicha cultura. Esta bruja diabólica era conocida como Kâ’lanû Ahkyeli’skï, y solo se presenta en las noches, mientras todos duermen. Este ser visita los sueños de las personas moribundas, su presencia física se puede notar cuando aparecen cuervos volando para robar el alma de los enfermos, o personas que están agonizando.
Otra criatura típica que se presenta en los sueños es el conocido como «El sombrerero», una sombra con la figura de un hombre con sombrero antiguo y ojos rojos que paraliza del miedo al que los ve en los sueños, impidiendo que puedan moverse y despertar (parálisis de sueño). Su significado es señal de angustia y perturbación en la vida. Esta criatura no se desvenase, sino que se retira del lugar, caminando tranquilamente. Algunos testimonios aseguran que lo han tocado en los sueños, reconociendo que es como un espíritu maligno.
Obviamente, los extraterrestres nos visitan y saben que mientras dormimos, somos vulnerables. Muchas personas aseguran haber sido visitados por extraterrestres en sus sueños, manifestando haber levitado o sentir dolor con las visitas de alguna criatura alienígena. Normalmente, estas visitas se relacionan con abducciones, ya que mientras duermen, se conectan de manera telepática con seres de otros mundos. Quienes han soñado esto, explican que sucede en la etapa de «sueño profundo», pero los avistamientos en sueños son muchos y se presumen que, en su mayoría, son reales, ya algunos afectados han despertado con marcas en el cuerpo, rasguños o golpes.
Uno de los más famosos y comunes, una criatura oscura, como una sombra. Muchas denuncias al 911 de personas dentro de hogares hacen referencia a siluetas negras que aparecen a la orilla de las camas, a plena vista, en ocasiones, capaces de moverse por las paredes, en otros casos, las sombras son agresivas, quedándose de pie, observando de una manera perturbadora a la persona mientras duermes. No poseen ningún tipo de masa, se mueven muy rápido y son entidades que lastiman, ahorcan y hacen daño a las personas. Su presencia se relacionan con el vacío emociona, problemas familiares o laborales.
Posiblemente, la leyenda más antigua de todas, un fenómeno usual, mucho más de lo que se cree. La llorona es una criatura avistada en todo el mundo, que se presenta en forma de fantasma y se asocia con fenómenos problemáticos y peligroso. Sin embargo, posee otros significados.
El primero de ellos puede relacionarse con un mensaje que subconsciente envía a las personas de ciertas carencias afectivas. Ahora bien, todo depende de como aparezca esta criatura. Si aparece quejándose posiblemente se trate de problemas amorosos, personales o sentimentales que están afectando su vida. Si la llorona levita sin quejarse, es señal de éxito y que lo que estás emprendiendo va a ser exitoso.
Si la llorona aparece vestida de negro, quiere decir que el fracaso vendrá a tu vida, o que la vida sexual está muy mal y es necesario hacer un cambio para mejorarlo. Si la llorona nos persigue, es que vienen cambios que deberemos afrontar, por más difíciles que sean.