Expediente Warren : Los Perron
Otra vez estamos aquí con un caso de los famosos investigadores de lo paranormal. Los Warren. Este caso en particular seguro que os suena. Los Perron. El caso en el que se basa la primera película de este peculiar matrimonio.
La familia Perron verdadera vivió en la casa durante aproximadamente diez años. Situado en el pequeño pueblo de Harrisville, Rhode Island. Roger Perron y su esposa Carolyn compraron la casa en el invierno de 1970. La propiedad de 200 acres ofrece un montón de espacio para que puedan criar a sus cinco hijas: Andrea, Nancy, Christine, Cynthia y Abril. Se mudaron en junio de 1980.
La historia
El espíritu más inquietante en la película es el de la bruja Betsabé Sherman. Nació en Rhode Island en 1812, se casó con Judson Sherman (un año mayor que ella) en Thompson, Connecticut el 10 de marzo de 1844. Les casó Vernon Stiles, un Juez de Paz local. Betsabé fue ama de casa mientras su marido Judson trabajaba como agricultor en sus tierras. Bastante acomodados, Betsabé y Judson tuvieron un hijo, Herbert L. Sherman, nacido cuando Betsabé tenía aproximadamente 37 años de edad, en Marzo de 1849. Es posible que tuvieran otros tres hijos, aunque ninguno de ellos sobrevivió más allá de los 7 años. A pesar de no haber registros de censo, se pudieron encontrar unos documentos que confirman estos datos.
Solo hay una foto en la que supuestamente aparece Betsabé. Es una fotografía de la granja de alrededor del año 1885. En la foto se ve a una mujer en el centro, la cual según Andrea Perron sería la supuesta bruja. Esto, probablemente no es más que una táctica sugerente para promocionar su libro, House of Darkness House of Light, ya que no hemos encontrado ninguna evidencia para apoyar que la mujer del centro de la foto sea Betsabé. Por otra parte, el hecho de que la mujer parece llevar una máscara quirúrgica, hace que sea casi imposible que nadie supiera su verdadera identidad. ¿Porque la mujer podría estar usando una máscara quirúrgica?, es más que probable que protegerse contra la propagación de bacterias de la gripe o una de las otras epidemias rampante de la época, como la difteria o la tuberculosis.
No hay pruebas contundentes para apoyar la hipótesis de que Betsabé Sherman fuera realmente una bruja. Los datos obtenidos son solo una leyenda o folclore local. Después de haber vivido en una granja vecina en la década de 1800, la sospecha creció cuando un bebé murió misteriosamente en su cuidado. Cuando se examinó el bebé, se determinó que la herida mortal fue causada por una gran aguja de coser que había sido empalada en la base del cráneo del niño. Aunque la gente del pueblo cree que Betsabé sacrificó al niño como una ofrenda al diablo, por falta de pruebas se estableció era inocente de cualquier delito. A pesar de esto,la gente no quedó convencido. En su libro House of Darkness House of Light , Andrea Perron escribe que su madre Carolyn habló con un hombre, al que ella se refiere como «el señor McKeachern”, un supuesto historiador local el cual le dijo a Carolyn que Betsabé trató con el mismísimo demonio.
tumba de Betsabé
Betsabé Sherman murió como una anciana el 25 de mayo de 1885, más o menos cuatro años después de la muerte de su marido Judson Sherman en 1881. Betsabé vivió para ver a su hijo Herbert convertirse en un granjero como su padre, y verlo casarse con su novia Anna en 1881. Ciertas leyendas encontradas por Internet, aseguran que murió tras “una extraña parálisis”, quedando petrificada o incluso transformándose en piedra. Pero esto no dejan de ser leyendas contadas en el pueblo tras su muerte.
Los Perron
Los Perron llegaron a la casa en 1970 para criar a sus hijos en una bonita casa. Pero la cosa, nada más llegar, no era lo que estaban esperando.
“Era un lugar extraordinario. Empezamos a ver espíritus, tan pronto como nos mudamos a la casa. La mayoría de ellos eran benignos, incluso algunos de ellos ni siquiera parecía darse cuenta de que estábamos allí, pero la verdad es que ocho generaciones de familias vivieron y murieron en esa casa antes de nuestra llegada, y algunos de ellos nunca se fueron”, según explico Andrea.
Al principio muchos de ellos parecían ser inofensivos, como una entidad que olía las flores y las frutas, otra que deba un beso de buenas noches a los niños en la cama cada día, o el espíritu que siempre cogía una escoba para barrer el suelo de la cocina. Todo lo que se refiere a fenómenos paranormales en una casa parecía estar sucediendo a la familia Perron, así como objetos que se movían por su cuenta, misteriosos golpes en las puertas, o extraños susurros durante toda la noche. Según explicó la familia, probablemente el fenómeno más aterrador era el sonido de algo que tenía la costumbre de golpear la puerta principal de la casa por la noche, despertando a toda la familia. Había, obviamente, algunos espíritus muy perturbados conviviendo con los Perron.
“Uno de los espíritus se llamaba ‘Manny’, él era un alma compasiva. Creemos que en realidad era Johnny Arnold, que se suicidó en el granero de la casa en el 1800. Vigilaba la casa y cuidaba de nosotros. Siempre se aparecía en el mismo lugar, en el pasillo del frente entre el comedor y la cocina. La aparición fantasmal siempre se apoyaba contra la puerta y ponía una sonrisa torcida como si él se estuviera divirtiendo con los niños. Tan pronto como lo veíamos y hacíamos contacto visual, él desaparecía.”
la granja
En la actualidad, Los Perron recuerdan perfectamente las características de las entidades que veían. A veces, los espíritus parecían opacos, aparentemente sólidos, y otras veces eran translúcidos o en forma de niebla. También afirmaron que los espíritus se comunicaban con los miembros de la familia, pero no era a través del habla, sino con la telepatía. Cindy, una de las hermanas de Andrea, lo describió como estar “en una burbuja”. El aire se comprimía y de repente se quedaban sin poder moverse o hablar, solamente escuchaba lo que el espíritu estaba tratando de decirle.
Después de sufrir todos estos episodios, que en algunos casos eran violentos, Roger y Carolyn Perron se pusieron en contacto Ed y Lorraine Warren. El matrimonio hizo una investigación de la actividad sobrenatural en la casa mientras la familia vivía allí. En un intento de ayudar a los Perron, se hizo una sesión de espiritismo y algo salió ciertamente mal. Aparentemente despertaron una terrible presencia. Según Lorraine, se trataba de Bathsheba.
Bathsheba quería el control sobre Carolyn Perron, ya que el espíritu se creía la dueña legítima de la casa. Pero el espíritu deseaba a Roger y codiciaba a los cinco hijos. Carolyn explico que el espíritu se le acercaba por la noche a la cual describe como un ser con una cara espantosa, deforme y con el cuello roto.
A pesar de la ayuda de Ed y Lorraine Warren, acabaron perjudicando a la familia. Los Perron se quedaron en la casa durante diez años más antes de poder marcharse definitivamente, pero los horribles fenómenos que ocurrieron dentro de las paredes de la casa se quedaron con ellos para siempre.
En este caso, y con poco que ver la película de The Conjuring, los Warren perjudicaron más que ayudaron. A pesar de que sus intenciones fueran las de socorrer a la familia, como hemos podido ver (la cosecha del mal, el poltegeist de Enfield o Annabelle) la situación empeoró con la llegada del matrimonio. Como ya hemos visto en anteriores artículos, no siempre ha sido así, aunque no todo fue bien en los casos paranormales de los Warren.